miércoles, 24 de septiembre de 2008

Retrospectiva de los espejos


No se cierran contratos con ausencias
y no se firman con el solo soplo del ¿Qué será?
¿Será?
Será que nos volvimos un tanto más ciegos
un tono más ásperos
habiendonos amarrado los párpados con las mismas pestañas.
Ya aquí NADIE se comprende. No se quieren entender
ni arrancándose las amígdalas; ya eso no basta.
Ni siquiera unos con otros se comprenden
ni uno a otros, ni otro a uno,
ni uno a uno, ni uno a uno-mismo siquiera se desenrreda la maraña
Ya ni se lavan los pies para cruzar otros caminos
(y el barro revuelto ya los confunden a todos por igual)
Si fuera algo como parecido a
algo,
serían como un montón de huellas de gusanos en el cadáver
de una guacamaya.

- ¿Qué de los gusanos?
¡Ya son moscas!
Volando por ahí.

Si seríamos algo parecido a eso,
por supuesto:
Sería como una canción triste-muy-triste!
y una bendición, la muerte.
Bastasen tres últimos soplos para decir:

Existo...

Y ya, se le pasa la maraña a otro.

2 comentarios:

Pietro dijo...

Venga mi pana, siempre que te leo tengo que prender un cigarro, porque así, simple y sano, no se puede.

Está buena la cosa.

Nos vemos pues.

Silvy dijo...

Vuelvo a leerlo y me sigue despertando sensaciones que inquietan.

Un beso